Economía de Baleares

Economía de Baleares en España

Aquí se ofrecen, respecto al derecho español, referencias cruzadas, comentarios y análisis sobre Economía de Baleares. [aioseo_breadcrumbs]

Economía de Baleares en Relación a Economía de Finales del Siglo XX

En este contexto, a efectos históricos puede ser de interés lo siguiente: [1] Es una de las provincias españolas de gran expansión económica debido principalmente al turismo (véase, si se desea, más sobre este último termino en la plataforma general). En consecuencia es zona de inmigración, lo que se traduce en aumentos demográficos sensibles, especialmente en la capital, Palma de Mallorca.
La estructura de la población activa, con un total de 255.000 personas, se distribuye por ocupaciones del siguiente modo: sector primario 24%, sector industria 31,2% y sector servicios 44,8% (1967). La renta provincial alcanza un volumen de 28.413,6 millones de pts (1967) y su distribución en porcentajes es la siguiente: sector primario 13,2%, sector industria 24,6% y sector servicios 62,2%. La renta personal es de 56.002 pts. (1967), superior a la media nacional. La actividad agraria se desarrolla en terrenos de escasa calidad y poca fertilidad, salvo en las fincas de secano de las zonas de aluvión. Del total de la superficie de las islas, el 55% está ocupado por terrenos cultivados, el 37% es inculto, pero productivo, y el resto totalmente improductivo. El regadío, que representa el 10% del terreno cultivado, tiene mucha importancia, por el bajo régimen pluviométrico de las islas. Las unidades de cultivo son en general muy pequeñas: el 86% de los cultivadores explotan menos de 2 Ha. de terreno, el 10% explotan terrenos comprendidos entre 2 y 6 Ha., y solamente el 4% restante posee terrenos de dimensiones adecuadas para su mecanización y_ rentabilidad. La aparcería continúa siendo el sistema de explotación más generalizado. Las principales producciones son los cereales, que representan un 26% del total; los árboles frutales con un 20%; las leguminosas con un 20%; y la patata con un 15%. Las leguminosas y las patatas tienen una alta rentabilidad, en tanto que la de los cereales es mínima.
A la producción ganadera se ha encomendado la futura base de la prosperidad de la provincia, teniendo en cuenta las. excelentes condiciones climáticas de las islas. Destacan el ganado vacuno y el ovino, principales fuentes de riqueza de B. Asimismo ha de hacerse mención de la avicultura y las plantaciones forestales, donde el pino ocupa la mayor superficie. La actividad pesquera es insuficiente para atender la demanda de consumo, lo que obliga al envío desde la Península de pesca congelada para su abastecimiento.
El sector industria tiene el inconveniente de que en muchos casos necesita traer las materias primas del exterior, con el consiguiente incremento de coste. La renta
industrial ha aumentado a un ritmo muy débil. La dimensión de las empresas supone una ocupación de 10 personas por planta, lo que impide alcanzar un índice de producción rentable. Las principales industrias extractivas son: lignito, yeso, marés, arcillas y salinas. Dentro de las industrias de transformación, destacan las textiles, cuero y calzado, madera y corcho, y químicas.
En el sector servicios, el comercio representa el 12% de la renta provincial y, debido a la expansión turística, se halla en constante incremento, lo que origina que, en orden a la concentración de consumo, las islas estén por encima de la capacidad de compra de sus habitantes. A este respecto, la provincia es deficitaria en arroz, aceite, pescado y vino, y excedentaria en hortalizas, leche, legumbres y patatas. El transporte ferroviario apenas tiene importancia económica; no así el marítimo y el aéreo (84% del total), que experimentan constante incremento para poder atender las demandas del turismo, lo que se traduce en su contribución del 10% en la renta provincial. B. está conceptuada como una de las provincias de mayor dinamismo turístico. A las islas concurre no sólo el turismo extranjero, sino el nacional. El porcentaje dentro de la renta provincial de los servicios de hostelería y esparcimiento alcanza el 23% de la misma. Se considera que el 10% del turismo extranjero pasa por B., a lo que hay que añadir que el número medio de días de estancia es de 10, cifra muy superior al promedio nacional. Para poder atender esta demanda, la provincia cuenta (1970) con más de 100.000 plazas de alojamiento turístico, lo que significa un incremento del 800% con respecto a 1960. Sin embargo, es necesario planificar la oferta en relación con la demanda. Si se compara el aumento anual de la afluencia turística (15,8%) con el de la capacidad hotelera (18,2%) se observa un equilibrio perjudicial para las industrias hoteleras. Ello, unido a un nivel empresarial insuficiente la mayoría de las veces, da lugar a un importante proceso de descapitalización. Los principales problemas que tiene planteados el turismo en B. son necesidad de una explotación más rentable de las empresas hoteleras; necesidad de ajustar la oferta a la demanda; solución del problema de la estacionalidad y, por último, planificar la economía insular teniendo en cuenta la continuidad e importancia del turismo y su trascendencia en el resto de los sectores.[rbts name=»economia»]

Recursos

Notas y Referencias

  1. Basado parcialmente en el concepto y descripción sobre economía de baleares en la Enciclopedia Rialp (f. autorizada), Editorial Rialp, 1991, Madrid

Véase También

Bibliografía

BANCO DE BILBAO, Renta nacional de España y su distribución provincial 1967, Madrid 1969; El turismo y el desarrollo regional, «Rev. de Información del INI», 1967; CONSEIo ECONÓMICO NACIONAL. GABINETE TÉCNICO, Desarrollo económico de la provincia de Baleares; 11 Plan de Desarrollo Económico y Social, Madrid 1968.

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