Guerra de la Unión de Aragón y Valencia en España en España

Aquí se ofrecen, respecto al derecho español, referencias cruzadas, comentarios y análisis sobre Guerra de la Unión. [aioseo_breadcrumbs][rtbs name=»derecho-home»] Conflicto interno (1347-48) que afectó a Aragón y Valencia y enfrentó las tropas de los nobles y de las ciudades y villas coaligadas a la Unión de Valencia y a la Unión de Aragón con las tropas de quienes se mantuvieron fieles a la autoridad real.

La guerra se inició en Valencia, donde el movimiento unionista era más radicalizado. Desde junio de 1347 ambas partes reunían tropas: el gobernador recibía refuerzos de Teruel y del rey y los unionistas pedían ayuda al niño Fernando. Pero el conflicto no se inició abiertamente hasta después del sangriento alboroto de Valencia de noviembre del 1347, provocado por la noticia de la muerte de Jaume de Urgell. Cuando las tropas unionistas se dirigían a auxiliar Cocentaina, acosada por su señor, el realista Alfonso Roger de Lauria, fueron interceptadas por las de éste y por las de Xàtiva en Puebla Larga, donde los realistas resultaron derrotados y donde murieron el lugarteniente de gobernador Andrés Guillem Escrivá, su hijo Arnau, Guillem de Bellvís, etc.

No mucho más tarde, Alfonso Roger de Lauria conseguía entrar en Cocentaina, pero este éxito se vio anulado por la derrota que los realistas sufrieron en Bétera (1347), batalla sangrienta en la que murieron el juez de Teruel, Pedro Muñoz, y Gonzalo Días de Arenoso, y cayó prisionero Ramon de Boixadors. El rey envió refuerzos al gobernador y decidió pasar personalmente con tropas en Valencia el fin de dominar la insurrección y evitar que la guerra se extendiera también a Aragón, donde los unionistas habían empezado a reunir tropas. Parte de estas tropas aragonesas fueron enviadas precisamente a Valencia, bajo el mando de Lope de Luna y Juan Ximénez de Urrea el Joven, para ayudar a los unionistas valencianos. Pero, debido a las diferencias entre ambos jefes, los conservadores de la Unión hicieron retirar a Lope de Luna, que entonces tomó partido abiertamente por el rey, se fortificó en Daroca y se coaliga con otros nobles realistas y con la ciudad de Teruel.

Al principio del año 1348, la guerra estalló también en Aragón. Mientras tanto, las tropas de Juan Ximénez de Urrea habían partido hacia Morella, y de ahí a Valencia, donde se habían unido con los 800 caballeros castellanos que había llevado al niño Fernando. También a comienzos de año, el rey Pedro se había instalado con sus tropas en Morvedre y se había fortificado esperando acontecimientos, pero para marzo faltó el dinero para pagar las tropas y tuvo que licenciarlas.

Poco después, una insurrección popular en Morvedre le obligó a dirigirse a Valencia, donde quedó en manos de unionistas, que retuvieron la ciudad hasta el mes de junio. Mientras tanto, continuaron en el reino y en Aragón las escaramuzas entre realistas y unionistas, con acciones limitadas, tales como la toma de Cocentaina. La partida del rey de Valencia hacia Teruel permitió, sin embargo, la reorganización de las tropas realistas. Justamente entonces los unionistas aragoneses atacaron a los nobles realistas cerrados en Épila (batalla de Épila). La intervención de Lope de Luna, que estaba asediando Tarazona ayudado por tropas navarras y castellanas, estas comandadas por su pariente Alvar García de Albornoz, provocó la derrota de los unionistas. El niño Fernando y Pedro Fernández de Híjar cayeron prisioneros de los castellanos y murieron Juan Ximénez de Urrea el Viejo, el cabecilla más destacado de la Unión, Gombalda de Tramacad, Ximena Peres de Pina y otros. Juan Ximénez de Urrea el Joven, que cayó prisionero, fue ejecutado, parece, a continuación.

La derrota significó el fin de la Unión aragonesa. Después de haber entrado en Zaragoza, el rey volvió a Teruel para organizar la campaña contra los unionistas valencianos, que mientras tanto se habían apoderado de Paterna, de Planes de la Baronía y del Puig, habían acosado Benaguasil y amenazaban Burriana desde Castellón de la Plana, lugar que pertenecía a la reina viuda Leonor de Castilla. Mientras las tropas realistas (unos 1.200 caballeros y 15 000 peones aragoneses y valencianos) se concentraban en Segorbe bajo el mando de Lope de Luna, los unionistas atacaban todavía Ribarroja del Turia, lugar de Ramon de Riu-sec, y saqueaban el call de Morvedre, para retirarse y fortificarse después en Valencia.

Un ataque por sorpresa en Mislata, defendida por los unionistas, dio la victoria a los realistas, victoria que fue decisiva y que determinó la rendición de Valencia.